La Junta encuentra dificultades en la aplicación de su “reordenación”
Sabido es lo impopular de estas medidas entre el personal propio de la administración autonómica. Los empleados públicos han salido a las calles numerosas veces, masivamente, para denunciar la trama de la administración paralela.
La administración paralela que no sigue las normas del juego, es ahora noticia por dos motivos:
1.-El paso del personal de Egmasa a la nueva Agencia del Medio Ambiente y del Agua, que ha conseguido que la Agencia Andaluza del Agua se “extinga” (cuando son ellos los que la han matado entre todos), ha sido cuestionado por un juez en Sevilla.
Habla de que la incorporación en la nueva agencia del personal de la antigua Egmasa vulnera todo lo establecido en el EBEP, estatuto público del empleado público; igualdad, mérito, capacidad y publicidad no se aplican con unos traspasos a dedo.
2.-La IFAPA, creada en la consejería de agricultura, cuyos estatutos de creación están suspendidos por sentencia judicial, sigue en un estado anómalo.
La Junta recurrió al TS está suspensión, pero el TS rechaza recurso ante esta decisión.
Los empleados públicos aunque ahora no salen a la calle, si impulsan demandas contra los planes de la Junta, como la que ha dado al traste con el paso de los empleados de Egmasa a AMAYA.
Esta reordenación seguirá siendo noticia, pues pese al empeño de la Junta de hacer las cosas contra viento y marea, muchos se han conjurado contra ella, y cuentan ya con compromisos de quienes políticamente darán el relevo al Psoe andaluz.
Toni.
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