Crimenes de guerra puestos al descubierto por Wikileaks.
Julian Assange, el fundador australiano del sitio web Wikileaks, asediado por el Gobierno de los EE.UU., mantiene su paradero oculto.
El fundador de Wikileaks, la web que divulgó 75.000 documentos militares y diplomáticos secretos de las operaciones del Ejército de EEUU en Afganistán, ha indicado este domingo que el Ejército estadounidense será el único responsable de cualquier daño que puedan sufrir los informadores afganos como consecuencia de la filtración, que abre las puertas para conocer el verdadero balance criminal de la invasión militar perpetrada en Afganistán por parte del imperialismo (unos 4 millones de muertos desde 2001).
A su vez, acusó al Pentágono de "tratar de desviar la atención" tratando de crear acusaciones infundadas y oponerse, con su manía persecutoria, a la libertad de información, a la democracia y al derecho de la opinión pública a conocer la verdad sobre el desastre de Afganistán.
Julian Assange expresó su "consternación" ante "la displicencia que exhibe el Ejército estadounidense en relación a sus informadores", en respuesta a las acusaciones vertidas desde Washington sobre el daño que estos documentos, muchos de los cuales revelan los nombres de estas fuentes afganas, pudiera hacer a las actividades estadounidenses en la guerra de Afganistán.
Los medios de comunicación corporativos ya están trabajando en la construcción de la culpabilidad de Wikileaks y de un soldado presuntamente "informador" (Bradley Manning) así como otras fuentes como causantes de actos de "alta traición".
Ante la posibilidad de que estas fuentes, ahora identificadas, fueran objeto de represalias, Assange declaró que el material filtrado ha sido puesto a disposición de todos los soldados y contratistas de Afganistán. "Es el Ejército quien debería ser hecho responsable por no advertir a sus informadores". Además, el fundador de Wikileaks indicó que una de las prioridades de la filtración ha consistido en garantizar la seguridad personal de las fuentes.
En los últimos días, el Pentágono responsable final de todas las operaciones bélicas causantes de millones de muertos en todo el mundo ha asegurado que Wikileaks tiene las "manos manchadas de sangre".
Por su parte, un colaborador de la web Jacob Applebaum fue detenido e interrogado en el aeropuerto de Newark (EEUU) por parte del FBI y un inspector de la US Army sobre su vinculación con Wikileaks y sobre su opinión acerca de las guerras de Irak y Afganistán. Tras negarse a "desencriptar" su labtop y ordenador personal, le fue requisado el material.
En las últimas horas, este portal de Interne fundado en el 2006 denunció que los Estados Unidos intentó de infiltrarlo. Asimismo, los ciberactivistas están promocionando en la red social Twitter el fonde de ayuda para la defensa del soldado Manning. El joven ex agente fue detenido en Irak y llevado a Kuwait. Pero el jueves último fue llevado a Quantico, en Virginia. Manning seguirá detenido mientras el ejercito investiga las filtraciones
No hay comentarios:
Publicar un comentario