BASTA DE
CRIMINALIZACIÓN DE LOS ESCRACHES
LA LUCHA OBRERA Y POPULAR ES COMPLETAMENTE
LEGÍTIMA
VIOLENTOS SON QUIENES
OBLIGAN AL PUEBLO A DEFENDERSE
Los intentos
de criminalización de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas y de los
llamados “escraches”, como forma de movilización y lucha contra los desahucios,
demuestran una vez más el carácter del actual régimen de dominación como
dictadura del capital. En cuanto un movimiento popular desborda mínimamente los
estrechos límites de protesta que acepta el sistema, es reprimido y
criminalizado. Baste recordar lo sucedido en la Huelga General del 14 de
noviembre y el intento de criminalización de los piquetes y la movilización
obrera.
Declaraciones
como las de Esperanza Aguirre intentando calificar a los “escraches” de actos
terroristas, las de Dolores de Cospedal comparándolos con el nazismo, o las de
Felipe González (que no se preocupa tanto por los sentimientos de los niños
cuyos padres sufren el paro o los desahucios), manifiestan la bajeza moral e
intelectual de quienes desde el poder político corrupto e defienden los
intereses de la banca y los monopolios cumpliendo con su papel de gestores del
capital.
El Partido Comunista
de los Pueblos de España expresa su total solidaridad con las personas
represaliadas mediante denuncias y multas por reivindicar un derecho tan básico
como es el de la vivienda y anima al movimiento anti-desahucios a no limitarse
a reivindicar soluciones parciales como la dación en pago y a exigir la
expropiación de todas las viviendas robadas por la banca a las familias
trabajadoras y el derecho efectivo a que todas las familias obreras dispongan
de una vivienda digna.
Asimismo, el
PCPE hace un llamamiento a la clase obrera y al pueblo
trabajador para no solo continuar las movilizaciones sino también
intensificarlas y desbordar, tanto en lo ideológico como en las formas de
lucha, el marco de dominación que intentan imponernos el capital y sus representantes
políticos.
Área de Comunicación del Comité Central del PCPE, abril de
2013
Cerca
de 400.000 familias han sido desahuciadas desde 2008 según la PAH.
Cerca de 2 millones de familias tienen
a todos sus miembros en paro.
20% de niños españoles viven en
situación de pobreza según Unicef.
Pero lo que preocupa a los políticos
burgueses es que sus hijos vean a sus padres señalados como culpables de la
crisis.
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